SAN SALVADOR, El Salvador.- El presidente Leonel Fernández exhortó ayer a la juventud iberoamericana a mirar con optimismo y entusiasmo el porvenir, aunque reconoció que la grave crisis que vive la humanidad está llevando incertidumbre a la población mundial, especialmente entre los jóvenes.
Observó que pese a la magnitud de la crisis que vive la humanidad tras la caída de los sistemas financieros, existen posibilidades de alcanzar nuevas realidades que permitan transformar los actuales niveles de pesimismo.
Agregó que su mensaje a los jóvenes iberoamericanos es que vean el presente y futuro con optimismo, particularmente porque existen condiciones para transformar la sociedad.
El mandatario dominicano citó que la juventud del siglo 21 dispone de una estructura tecnológica que será la base para establecer el nuevo modelo económico en el planeta.
Refirió que el nuevo mundo que se proyecta tendrá de soporte el conocimiento, los avances científicos y tecnológicos.
Fernández fue entrevistado por la periodista Ilana Sod para la cadena de televisión estadounidense MTV. Fue coordinada por representantes de la Organización Iberoamericana de la Juventud, presentes en la XVIII Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estados y de Gobiernos.
Estableció que actualmente la juventud dispone de un nuevo lenguaje a través de la sociedad digital.
Narró los esfuerzos del Gobierno dominicano para ampliar la cobertura tecnológica en la República Dominicana por medio de los Call Center y unidades tecnológicas en Santo Domingo y provincias, con el objetivo de reducir la brecha digital entre los dominicanos.
Durante la jornada de ayer en la Cumbre, el presidente Fernández planteó la necesidad de una transformación estructural de la sociedad ante la crisis mundial.
Consideró que el futuro de la juventud iberoamericana dentro del contexto de la actual crisis mundial, tiene como principal desafío la educación, la cual agregó, debe ser planteada dentro del contexto de la nueva realidad del planeta.
Dijo también que generalmente en América Latina el tema educativo se limita a cuál es el nivel de inversión que se hace en educación con respecto al Producto Interno Bruto.
Entiende eque si se tiene un nivel de inversión por debajo del cuatro por ciento se considera, que es deficitario, y por consiguiente, no hay futuro en ese modelo educativo.
“Es parte del debate, pero no puede reducirse a eso, porque puede haber países que efectivamente tengan un cinco, un seis y hasta un ocho por ciento de inversión del PIB en educación, y sin embargo tengan resultados educativos que no sean realmente óptimos”, reflexionó.
Fernández dijo que por detrás del tema de la inversión, la cobertura, y garantizar la no repitencia y la no deserción, hay un problema que tiene que ver con la filosofía educativa y con la calidad de la educación.
En ese sentido, manifestó que ese cuadro plantea a las naciones latinoamericanas el reto de ¿qué tipo de educación queremos para el siglo 21?
Citó que en este siglo veintiuno un elemento básico, fundamental de la educación de la región, es enseñar a nuestros jóvenes a pensar.
Al respecto, indicó que ¨ creo que el problema fundamental del sistema educativo en nuestros pueblos, es que la juventud no ha sido enseñada para pensar sino a memorizar textos no siempre bien comprendidos ¨.
